es
Böcker
Gilles Deleuze

Proust y los signos

«Una de las mejores tentativas hasta ahora realizadas de desvelar las leyes estructurales de la obra de Proust» (Madeleine Chapsal, L‘Express).
El genio de Proust tuvo finalmente el ensayista que merecía su obra: Gilles Deleuze. En esta magistral indagación de las leyes estructurales de su obra, Deleuze demuestra de forma inapelable cómo la experiencia de la escritura de En busca del tiempo perdido, además de movilizar lo involuntario y lo inconsciente produce sus propios procedimientos de sentido. Así Proust logra una maquinaria que funciona con eficacia invisible capturando al lector.
Deleuze descubre alternancias y oposiciones, así como diversas claves de la obra, en un proceso de aprendizaje que es al mismo tiempo el del autor y el del lector. La obra se desenvuelve armoniosamente hasta su meta final: lograr la redención gracias al descubrimiento de la verdad. Pero para Proust, al inicio de la obra no hay verdades, sólo jeroglíficos, de ahí que la «recherche» (que tiene el doble sentido de investigación y búsqueda) consista en interpretar y traducir hasta lograr que coincidan el signo y el sentido.
205 trycksidor
Ursprunglig publicering
2021
Utgivningsår
2021
Översättare
Francisco Monge
Har du redan läst den? Vad tycker du om den?
👍👎

Intryck

  • Denissdelade ett intryckför 2 år sedan
    👍Värt att läsa

Citat

  • Denisshar citeratför 2 år sedan
    La Recherche no está construida ni como una catedral ni como un vestido, sino como una tela. El narrador-araña, cuya tela es la propia Recherche haciéndose, tejiéndose con cada hilo movido por determinado signo: la tela y la araña, la tela y el cuerpo son una y la misma máquina. Aunque dotado de una sensibilidad extrema y de una memoria prodigiosa, el narrador no tiene órganos, en la medida en que está privado de cualquier uso voluntario y organizado de sus facultades. En cambio, una facultad se ejerce en él cuando está obligada y forzada a hacerlo; y el órgano correspondiente se posa en él, pero como un esbozo intensivo despertado por las ondas que provocan su uso involuntario. Sensibilidad involuntaria, memoria involuntaria, pensamiento involuntario que son cada vez como las reacciones globales intensas del cuerpo sin órganos a signos de una u otra naturaleza. Este cuerpo-tela-araña se agita para entreabrir o cerrar cada una de las pequeñas cajas que tropiezan con un hilo pegajoso de la Recherche. Extraña plasticidad del narrador. Este cuerpo-araña del narrador, el espía, el policía, el celoso, el que interpreta y el que reivindica –el loco– es el esquizofrénico universal que tenderá un hilo hacia Charlus el paranoico y otro hilo hacia Albertine la erotómana para convertirlos en las marionetas de su propio delirio, en otras tantas potencias intensivas de su cuerpo sin órganos, en otros tantos perfiles de su locura
  • Denisshar citeratför 2 år sedan
    De hecho, el narrador es un Cuerpo enorme sin órganos.
    Pero ¿qué es un cuerpo sin órganos? Tampoco la araña ve nada, ni percibe nada, ni recuerda nada. Se limita a recoger, en un extremo de la tela, la menor vibración, que se propaga a su cuerpo en ondas de gran intensidad, y que hace que salte al lugar preciso. Sin ojos, sin nariz, sin boca, la araña responde única y exclusivamente a los signos, está penetrada por el menor signo que atraviesa su cuerpo como una onda y la hace saltar sobre su presa.
  • Denisshar citeratför 2 år sedan
    A finales del siglo XIX y principios del XX, la psiquiatría estableció una distinción interesantísima entre dos clases de delirios de los signos: los delirios de interpretación del tipo paranoia y los delirios de reivindicación del tipo erotomanía o celos. Los primeros presentan un comienzo insidioso y un desarrollo progresivo que depende fundamentalmente de fuerzas endógenas y se extiende en una red general que moviliza el conjunto de los esfuerzos verbales. Los segundos tienen un comienzo mucho más brusco y están vinculados a ocasiones externas reales o imaginarias; dependen de una especie de «postulado» que afecta a un objeto determinado y entran en constelaciones limitadas; no son tanto delirio de ideas que pasan por el sistema en extensión de los esfuerzos verbales como delirio de acto, impulsado por los esfuerzos intensivos de objeto (la erotomanía, por ejemplo, se presenta más como una persecución delirante del ser amado que como una ilusión delirante del ser amado).

I bokhyllorna

fb2epub
Dra och släpp dina filer (upp till fem åt gången)