En cambio, de hados no sabía nada. Así que cuando vio al hado con aquellas pintas tan extrañas, cometió el error de decir:
Joyce Aguilarhar citeratför 6 år sedan
Por su culpa la Seño tuvo que empezar a hacer diktados y kálculo mental, y al final ni ella misma sabía kuáles eran las berdaderas reglas de hortografía.
Joyce Aguilarhar citeratför 6 år sedan
El hada de Ludovico, además de ser un desastre en ortografía, era terca como una mula.