Un ensayo en filosofía actual de la ciencia con un enfoque naturalista que examina tanto los factores intelectuales en el avance del conocimiento como los condicionantes sociales y de aplicación del mismo. La obra confluye con los llamados estudios sociales de la ciencia, campo de trabajo contemporáneo ya consolidado que trata de recuperar la dimensión social de la ciencia sin perder de vista su potencial de transformación del entorno. El estudio aborda un episodio histórico: el triunfo de la medicina antiséptica y de la visión etiológica de la enfermedad, específicamente de 1840 a 1880, periodo fascinante de la historia de la medicina, con el estudio del origen de la fiebre puerperal o de posparto, la aceptación de la teoría del germen de la enfermedad y la difusión de las prácticas antisépticas.