El arte de una charla ocurrente

hiciste en el paso uno le asigne un valor relativo.

Por ejemplo, si elogias a alguien diciendo “vaya, eres genial haciendo de copiloto”, continúa y dale un título o etiqueta, como por ejemplo “la personificación de Fernando de Magallanes”, o “mi GPS personal por excelencia durante los viajes”.

Si te vas hacia el otro extremo y bromeas con alguien diciendo “eres terrible como copiloto”, le darás un título o etiqueta como “eres como Lewis y Clark, pero ciegos”, o “Google Maps pero offline”.

Es importante que de hecho les des un título o etiqueta, en lugar de solo describir lo bueno o malo que son en comparación contigo. Es importante porque… ¡ese es el rol que van a asumir!

Aquí verás por qué es tan importante que la afirmación que hi

No los estás juzgando, pero estás haciendo una declaración que le asigna valor a la otra persona.

Paso dos: etiquétalos basado en la afirmación que hiciste.

persona tiene mejor gusto en ropa que tú. En relación contigo, son superiores en este aspecto.

Por otro lado, una broma los pone en un rol inferior a ti. Por ejemplo, cuando dices “que buena chaqueta. ¿Las hacen para mujeres?”, la implicación es que no pueden diferenciar entre las chaquetas de hombre y las de mujer, y necesitan ayuda para vestirse. Hablando relativamente, eres superior a ellos en este aspecto.

El truco es que la afirmación tiene que ponerlos en contraste contigo. Tiene que hacerlos relativamente mejor, peor, más divertidos, más felices, más locos o más calmados que tú. Puede ser un elogio o una broma mientras te diferencie de la otra persona.

Por ejemplo, puedes ofrecerles un elogio. Esto los pone en un rol superior a ti. Podrías decir “tu sentido de estilo es tan genial, ¡desearía tenerlo también!”. Esta afirmación implica que la otra

diarias con el juego de rol. Piensa en lo poderoso que te sientes cuando llevas una máscara en Halloween y te conviertes en alguien anónimo.

Entonces, ¿cuáles son los pasos en el juego de rol?

Paso uno: haz una afirmación “crítica” sobre alguien.

La mayoría de las personas acepta el juego de rol porque nuestros roles personales pueden estar muy restringidos en la realidad. Por ejemplo, tu rol es el de un hijo, un amigo, un novio, un empleado y así sucesivamente. Es demasiado fácil definirte basado en tus roles en lugar de quién eres realmente. Como resultado, la mayoría salta a la oportunidad de salir de liberarse de sus vidas dia

Estás creando una obra de comedia improvisada en el momento y, con esta técnica, le dices a las personas qué roles tendrán por lo que naturalmente te obedecerán. Eres quien está iniciando el juego de rol y esto les permite a las personas seguirte cuando vean una dirección clara de a dónde ir.

Allí yace la magia del juego de rol. No solo es genial para el juego y entretenimiento conversacional, sino que también puede sacarte de tus prisiones conversacionales. Te permite decir lo que de otro modo no dirías y actuar de maneras en las que normalmente estarías muy cohibido para hacerlo.

Se trata de jugar e inyectar mucha diversión e informalidad a tu conversación. No quieres estar atascado en una situación donde haces una pregunta y la otra persona responde, luego esa otra persona hace una pregunta y tú respondes. En muchos casos, esos intercambios son superficiales y fáciles de olvidar.

Ahora bien, ¿qué pasaría si decidieras actuar como alguien de un programa de televisión o de una película? ¿Qué pasaría si te imaginas activamente lo que ese personaje haría en tu situación y lo dijeras en voz alta?