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Chris Carter

El verdugo

  • Marta Rimoldihar citerati fjol
    Falla de las Colinas de San José.
  • Marta Rimoldihar citerati fjol
    costa del Pacífico
  • Marta Rimoldihar citerati fjol
    la Union Station de Los Ángeles
  • Marta Rimoldihar citerati fjol
    boulevard Paramount Sur.
  • Paloma Akihikohar citeratför 2 år sedan
    doctor Winston asintió y señaló el cuello de la víctima, donde se veían de ambos lados decenas de pinchazos muy cerca unos de otros:

    −No solo los brazos. También utilizó las venas del cuello. Cada vez que llenaba una jeringa, el asesino necesitaba un lugar en el cual dejarla antes de pasar a la siguiente. −
  • Paloma Akihikohar citeratför 2 år sedan
    Si se intenta extraer sangre de alguien de la pierna o el pecho o algún otro lugar que no sea una zona de venopunción utilizando una jeringa −continuó el doctor−, a no ser que uno tenga la suerte suficiente de dar con una vena, se extraerá muy poca sangre, si es que se extrae algo.
  • Paloma Akihikohar citeratför 2 år sedan
    Debido al color de la piel de la víctima, los hematomas eran difíciles de localizar, pero Hunter ya había notado la cantidad exagerada de pinchazos en la sección central del brazo de la víctima.
  • Paloma Akihikohar citeratför 2 år sedan
    Señaló la sección central interna del brazo derecho de la víctima−. Como todos vosotros sabéis, dada su elevada presión de flujo sanguíneo, la vena basílica del brazo es la vena preferida para la venopunción... la extracción de sangre. Si os acercáis, notaréis que la zona de la vena basílica en ambos brazos ha sido pinchada tanto como fue posible.
  • Paloma Akihikohar citeratför 2 år sedan
    Dicen que cuando se trata de peligro o miedo, los seres humanos son como cualquier otro animal. Lo podemos sentir. Algún instinto primitivo dentro nuestro nos alerta. Y algo dentro de Darnell le estaba gritando para que saliera a toda prisa de ese auto.
  • Paloma Akihikohar citeratför 2 år sedan
    No me gustan para nada las agujas, ¿sabes? Me ponen los pelos de punta.

    La mano de Ryan envolvió la jeringa que tenía en el bolsillo y Ryan sonrió.
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