Citat
A Alfonsina Storni
I
¡Un hijo, un hijo, un hijo! Yo quise un hijo tuyo
y mío, allá en los días del éxtasis ardiente,
en los que hasta mis huesos temblaron de tu arrullo
y un ancho resplandor creció sobre mi frente.
Decía: ¡un hijo!, como el árbol conmovido
de primavera alarga sus yemas hacia el cielo.
¡Un hijo con los ojos de Cristo engrandecidos,
la frente de estupor y los labios de anhelo!
Sus brazos en guirnalda a mi cuello trenzados;
el río de mi vida bajando a él, fecundo,
y mis entrañas como perfume derramado
la ceniza precoz de la muerte. En mis días,
como la lluvia eterna de los polos, gotea
la amargura con lágrimas lentas, salobre y fría.
Mientras arde la llama del pino, sosegada,
mirando a mis entrañas pienso qué hubiera sido
un hijo mío, infante con mi boca cansada,
mi amargo corazón y mi voz de vencido.
Y con tu corazón, el fruto de veneno,
Intryck
Nuestro primer libro para la consigna diez de la maratona Guadalupe-Reinas: poesía para las infancias.
A JD chiquito y a mí nos tomó unos cuatro días leer estos poemas. Intenté interactuar lo más posible con las palabras y las bellas ilustraciones. Algunas le llamaron mucho la atención permitiéndome percibir sus diferentes expresiones y estados de ánimo. JD tiene cuatro meses, espero arrullarlo con un par de estos versos muchas más veces.
Por el tono y el tema de época algunas rimas me parecieron aburridas o repetitivas. Pero es innegable la sensibilidad de Gabriela Mistral, además de la fortuna de que sus letras para las infancias sean recuperadas y puestas en una edición tan bonita. 💫
Muy linda esta versión que comprende las más lindas rondas y arrullos de la mano de una gran poeta nacional.