n condiciones normales, la gente que miente con la misma facilidad con la que respira nunca está dispuesta a admitirlo. Tiene una capacidad interminable de inventar nuevas mentiras para explicar las anteriores. No se trata de un problema moral, en mi opinión, sino de una enfermedad mental.
Ana Saenzhar citerati fjol
Por favor, intente comprenderlo: no le mintió, ni a mí tampoco, ni a nadie en concreto. Se limitó a… alterar la verdad, porque se sentía más cómodo de ese modo. Y ahora ya nunca podré llegar al fondo del asunto. Nunca comprenderé por qué lo hizo.